(Continuacion de la anterior entrada, NUMERO 18: PARTE 1)
De
verdad que no me imaginaba así Varanasi, es un lío de calles! Cuando piensas
que una calle da a un Ghat te lleva a un callejón, y cuando piensas que vas
bien de vuelta la Hostel llegas a un Ghat y ves a todos los
El
primer día cogimos un bote con un montón de grindis y dimos una vuelta por el
Ganges disfrutando de los preciosos Ghats y los palacios que suele haber a su
lado.
Parece que los Ghats los construían príncipes, terratenientes,
Maharajás…etc y construían también su castillo al lado y de esa forma tenían
acceso directo al río sagrado. Los Hindús piensan que bañarse en el Ganges
sirve para purificar sus pecados, el río se los lleva. Y también que si te
incineran aquí, alcanzas el Nirvana directamente y sales del ciclo de las reencarnaciones.
Así que los príncipes, Maharajás, terratenientes... cobraban al pueblo por usar sus Ghats para
bañarse o ser incinerados…
Hablando
de incineraciones, hay dos Ghats importantes dedicados exclusivamente a este
“evento”, y el “Manikarnika Ghat” es el más importante. Más de 100 cuerpos son
incinerados cada día en este Ghat. Lo fuimos a visitar prontito por la mañana.
Nada más llegar en ciclo-rickshaw a la zona donde los coches no pueden
continuar, pues a partir de ahí empiezan las callejuelas hasta llegar al Ghat,
vemos una especie de ambulancia y dentro hay lo que debe ser un cuerpo. Para
poder ser incinerados, los cuerpos deben estar envueltos en una sábana que ha
sido previamente mojada en el Ganges y deben ser también transportados hasta la
zona de cremación, en el centro del Ghat, mediante una camilla construida de
bambú. Al lado de la ambulancia estaban los que nos imaginábamos eran los hijos
del difunto. La verdad es que no aparentaban
mucha tristeza. Estos indios
asumen la muerte como una parte ineludible e imprescindible de la vida para
alcanzar el Nirvana. Bajamos al Ghat de las cremaciones por las callejuelas y
una vez allí, un hombre nos invita a ver las cremaciones desde un balcón que
hay al lado de un hospicio, previo pago de algo de madera que usarán los
ancianos sin dinero del Hospicio para ser incinerados en breve…
Este es otro
tema curioso de los Indios. La madera, como no hay sitio por las callejuelas
para llevarla al Ghat en camiones, se trasporta en barcazas desde el río, y allí
se almacena, flotando en una barcaza sobre el río hasta que alguien la compra
para incinerar a un familiar. La de sándalo parece ser la más cara ya que es un
árbol, según ellos, sagrado. Prácticamente se endeudan para poder pagar la
cantidad de madera que en algo más de tres horas habrá consumido todo el
cuerpo. Por supuesto las fotografías y videos están estrictamente prohibidos en
todo el Ghat.
Ya
por la noche, fuimos al principal Ghat de ceremonias, y pudimos ver de nuevo el
famoso “Ganga Aarti” que se celebra a las 7:00 PM cada día, como
La
diferencia en Varanasi es que se puede alquilar una barca y ver la ceremonia
desde enfrente, algo que hasta ahora no habíamos visto.
La
última cosa que me ha sorprendido de Varanasi ha sido la cantidad de suciedad
que hay por la ciudad, es increíble, como en ninguna otra ciudad que hayamos
visitado. Los olores, la acumulación de “mierda” por las calles, las calles
medio destrozadas, restos de verduras de los mercados cercanos acumulados en
montones por las calles…a esto se le suman perros por todas partes, vacas,
cabras…
menudo quilombo! Y todo esto se da en calles enanas, estrechísimas. Además, la cantidad de gente que duerme en la
calle es mayor de lo que hemos visto en cualquier ciudad anterior. Realmente
Varanasi es diferente, esto es la “profunda” India. En contrapartida, estamos
en una ciudad muy artística. Aquí hay más escuelas de música que en ninguna
ciudad de la India. De aquí es el grandísimo músico Ravi Shankar, el mejor
músico e intérprete de Sitar del mundo y que fue el que enseñó a George
Harrison a tocar este precioso instrumento. (además de ser el padre de Nora
Bueno,
pues como hay un montón de tiendas de música Hindú donde se imparten clases de
Sitar y “Tabla” (los tambores indios) y a mí siempre me han atraído esos dos curiosos
tamborcillos , pues me he apuntado a dar un par de clases en una escuela que
hay justo al lado del Hostel. Y anda si es difícil dominar la “Tabla”… muy
difícil. Aunque viendo a mi joven profesora “Mrilanini”, cualquiera diría que
es difícil… Si encuentro en Madrid quién me puede seguir enseñando, no lo
dudaré, el sonido que sacas de los
“Este
de la foto eres tú?” Le pregunto al padre de Mrilanini y dueño de la escuela y
tienda de instrumentos musicales, “No, es mi suegro”. Pues el suegro estaba al
lado de Ravi Shankar en la foto. Parece ser que eran amigos de la infancia,
Ravi vivía cuando era joven a 100 metros de allí…
PD:
A la pregunta que nos haciamos sobre si era realmente el Ganges un rio sucio, o el
mas sucio del
mundo, como se dice comunmente... Tampoco es que lo vieramos muy
sucio la verdad, hasta que ayer por la tarde: “Estefi, que es eso que flota?” Y
efectivamente, era una vaca muerta flotando por el rio “sagrado”. Mucho rio
sagrado, pero luego lo usan como un estercolero...
Ya
en el tren nocturno de vuelta a Delhi, conocimos a un encantador mochilero
Holandes que nos conto que habia visto flotar en el Ganges el cuerpo de un
hombre...
Hola Juan !!! impresionante estas ultimas entradas..el viaje esta tocando a su fin y ya espero verlos para saber mas de ese alucinante pais que es la India y que has conseguido reflejar tan bien con tus palabras y tus fotos...okok, espero que la vuelta no sea muy dura, por estos lares también tenemos tambores (no tan chulos...), gente en la calle (osando reclamar no se que cosas sobre el avasallamiento de ciertos políticos..ejemmm)y nos faltarían las vacas y el rio sagrado, pero siempre nos podemos dar una vuelta por Asturias (que Argentina queda un poco lejos..) y además el Manzanares también detenta la suyo...
ResponderEliminarHasta la vista pues, que quedan muchos km por recorrer y estos últimos han estado muy buenos !!!!..besosss
euge
Hola Euge!!!Muchas gracias por seguir el blog tan de cerca como siempre. Cada país es diferente, no creo que a los indios les gustara vivir por ejemplo en Madrid. Pero al final te acabas acostumbrando, incluso a darte baños sagrados en el Manzanares... A nosotros este país nos apasiona, aún así por aquí no nos quedamos... nos vemos en breve.
ResponderEliminar